La jornada de inauguración de la Feria del Libro de Buenos Aires es todo un acontecimiento al que acuden intelectuales y escritores de todos lados del mundo. De hecho, en esta edición se cuenta con exponentes patrios como Rosa Montero, Juan José Millás o Antonio Muñoz Molina, algunos de los privilegiados. Hasta la fecha se había propiciado la presencia de un autor argentino en el acto de inauguración, que pronunciase el discurso de apertura y se erigiese como el invitado de honor de las jornadas literarias. Esta vez le ha tocado el turno a un peruano con una ingente producción a sus espaldas y un premio Nobel de Literatura, Mario Vargas Llosa. Pero lo que para la mayoría es un honor, para unos pocos se trata de una afrenta imperdonable contra el gobierno de la presidenta Cristina Fernández.

Feria del Libro de Buenos Aires.
De este modo, la esperada 37ª Edición de la Feria del Libro de Buenos Aires tiene un mancha negra en su expediente incluso antes de haberse inaugurado. Y es que, al parecer, determinados intelectuales pro-kirchner no ven con buenos ojos la visita (y el discurso) de un literato que ha sido explícitamente crítico con el fallecido mandatario Néstor Kirchner y su mujer, la actual jefa de Estado. En concreto, es el director de la Biblioteca Nacional argentina, Horacio González, junto con otros intelectuales como José Pablo Feinmann, Aurelio Narvaja y Vicente Battista, quienes son los instigadores de esta iniciativa, que aún no se sabe si cuenta con el beneplácito de la Casa Rosada.
Lo que sí parece ser cierto es que el rechazo a las críticas de Vargas Llosa es explícito. El propio González ha llegado a afirmar, según recoge El País, que encuentra «sumamente inoportuno» que el Nobel viste la Feria del Libro debido a que no combina bien «con las corrientes de ideas que abriga la sociedad argentina«. Por lo visto, parece que nadie le ha recordado a este hombre que existe la libertad de palabra y que el boicot a las ideas y el rechazo a las críticas no es buen remedio si lo que se quiere es ganar la partida con dignidad. De hecho, aquello que más temen los defensores de Cristina Fernández es que el escritor lance pullas que la hagan quedar mal durante su discurso de inauguración. De hecho, si finalmente Vargas Llosa asiste a la Feria, es probable que la presidenta no acuda a la inauguración del evento.

El escritor en la ceremonia de los premios Nobel / Getty Images
Son muchos los que están sorprendidos ante este ataque directo al Nobel, que además solo consigue politizar en exceso una Feria del Libro destinada al encuentro entre escritores y lectores, donde el diálogo debería ser la tónica dominante. El periodista argentino Jorge Fernández ha hecho unas declaraciones reveladoras al mismo periódico, exponiendo que «lo que sucede con Vargas Llosa demuestra que si Jorge Luis Borges estuviera hoy vivo no podría tampoco inaugurar la Feria del Libro, porque Borges tenía la misma actitud crítica ante el peronismo y el populismo«.
Foto por loco 085 en Flickr
jar
Nadie en Argentina critica su obra, lo que molesta es que anda por el mundo criticando a los pueblos y diciendoles como es que hay que vivir y que elegir. Es impertinente e irrespetuoso.
norma riport
No debería haber surgido ningún comentario. Ni de una parte ni de la otra. V.Llosa puede decir lo que quiera.Y quienes lo criticamos, también. Si sus opiniones nos ofenden, por qué no responder? Pero reconozcamos que este autor vive atacando a nuestro gobierno, que es el único que ha mejorado la situación del país. No pregunten esto a los latifundistas ni empresarios, pregúntenle al pueblo, a los trabajadores, a los docentes….. Que cada uno haga su lectura, acá,ahora, se puede hablar.
Jorge
Me parece que es un error de la nota presentar esto como una problema entre esos «unos pocos» que apoyan al la presidenta y los genios y sensatos intelectuales bien pensante. En lo personal y en mi orientación política puedo decir con bastante satisfacción que no soy peronista pero no puedo dejar de estar conforme con el gobierno actual. Con respecto al escritor es libre de pensar lo que quiera y el hecho que pueda venir y hacerlo en la feria del libro habla de la libertad que existe en mi país. Decir que uno no esta de acuerdo con su participación por su orientación ideológica y sus prejuicios manifestados públicamente hacía nuestro país no es intentar boicotear nada.
Me parece desafortunado este articulo con tan pocos argumentos y tan poco justo con todas las partes como debería serlo alguien pensante. Deberían compensar con otro articulo que muestre de forma no tan prejuiciosa como el presente lo que esta en cuestión en esta discusión. Ningún nefasto gobierno esta tratando de encarcelar a un pobre intelectual comprometido, eso es una gran ingenuidad. Lo más probable es que sea a la inversa